Girona vs Almería (6-2)
El partido que abriría la jornada 22 se prevenía un partido bastante igualado pero con goles asegurados, ya que uno de los clubes que más encaja cada partido, los dos conjuntos, estaban en la zona media de la tabla, se jugaban los 3 puntos para alejarse cada vez más del descenso.
A los 7 minutos las gargantas de Montilivi cantarían el primer gol de su equipo a cargo del Taty Castellanos, en un muy buen centro del ya consolidado como una de las piezas claves de Míchel, Arnau Martínez, el cual veía el desmarque de su compañero y se la ponía teledirigida a para que el ariete del Girona solo tuviera que poner la cabeza. A partir de aquí, empezaría el «jogo bonito» del Girona, que hasta el 36′ no marcaría el segundo, obra de Tsygankov, extremo que fichó el equipo gironí en el mercado invernal. Y en tan solo 10′, los locales meterían otros dos tantos más (Riquelme, y Javi Hdez.) para poner el 4-0 en el marcador e irse al túnel de vestuarios con casi los 3 puntos en la mochila.
La segunda parte sería mucho más relajada, con un Girona más tranquilo siendo consciente del marcador a favor. La UD Almería intentaba levantarse de los golpes que había recibido con tanta facilidad en los primeros 45′, cuando en el 66′, Largie Ramazani marcaba el gol de la consolación para los andaluces. Míchel pondría en los últimos 15′ a Iván Martín y al pichichi uruguayo Stuani, y los cambios dieron su fruto, ya que en el 77′ y en el 79′ ambos marcarían los dos últimos tantos para su equipo y alcanzar la media docena de goles. El partido lo cerraría El Bilal con ya sí que sí el último gol del Almería y del partido.
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